Las cupcakes, esas magdalenas de toda la vida que ahora se adornan con un toque de fantasía y mucha alegría, parece que se han convertido en algo indispensable a la hora de endulzar nuestro día a día. Y de endulzar precisamente saben mucho en Florentine Cupcakes, una pequeña y deliciosa (nunca mejor dicho) bakery que tienes que descubrir, si no la conoces ya, en el siempre dinamico y sorprendente barrio del Born.
Cookies de muchos sabores, auténticas obras de arte convertidas en increíbles tartas personalizadas, o las joyas de la corona, las cupcakes y sus interminables toppings, frostings y sabores, son la carta de presentación de este coqueto local que ofrece sus dulces creaciones para todo tipo de eventos, siempre por encargo, y que harán las delicias de los más golosos. Porque como ya sabéis.... a nadie le amarga un dulce, no?
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